Desayunos Baelo Claudia Saludable I

Hoy toca multi entrada y aprovechando el ratito de siesta que me dejan, os cuento como son algunos de mis desayunos, que no todos, pues en la variedad está el gusto jejeje!!

Hoy además, todo casero casero.

Comenzamos la mañana con un  buen vaso de agua templada con zumo de limón,  hoy al ser domingo y madrugar menos, me he saltado el batido habitual de frutas y semillas de chía que viene una media hora después porque si no comeríamos a las 5 de la tarde para darle a cada alimento su tiempo de digestión. ;-)

Así que después del limón, desayuno de leche de avena y sésamo casera con café y achicoria, con tostadas de pan casero de cereales (harinas integrales de centeno y arroz, pipas de girasol y calabaza, pasas, y semillas de lino), y mermelada casera de fresas. Si pincháis en los enlaces, podréis leer las bondades de los ingredientes de mi desayuno.

Y aquí mi receta de la leche de avena y sésamo, hecha en Thermomix TM31 y obviamente con marca de la casa y tuneada.

75 gr de copos de avena
10 gr de sésamo crudo
canela molida o en rama (opcional, pero a mi me encanta así)
5 gr de sirope de ágave (a veces lo pongo y a veces no) :-)
1 litro de agua

Se muelen los copos de avena, el sésamo y la canela durante 1 minuto en velocidad progresiva hasta el 8, lo sacamos y dejamos en un bol, después calentamos el agua a 70 grados, (esto lo leí en la web de thermorecetas, ya que su receta de leche de avena es la que más me ha gustado de las que he probado y es de la que parte mi tuneo particular) yo caliento el agua con el sirope y a velocidad 3 para emulsionarlo un par de minutos.

Cuando ya está caliente se añade la harina resultante de moler la avena sésamo y canela y se bate todo junto a velocidad 8 durante 2 minutos, así aprovecho prácticamente toda la avena, (si queréis la leche muy líquida, lo batís menos tiempo y a menor velocidad y coláis con gasita, para que hasta lo más fino se quede sin pasar a la leche resultante). A mí me gusta así ya que se aligera con el café, y para preparar papillas infantiles caseras es genial y no se pierden nutrientes.


Ahora le va a tocar el turno a la mermelada de fresas. Siempre creí que era más complicado hacer una mermelada rica, además todas suelen llevar un montón de azúcar así que investigando encontré varias recetas y de la que parte mi versión es de la receta que vi en la web de La Cocina Alternativa así que vamos con ella:

Las medidas son para un tarrito pequeño, porque es tan fácil que mientras sea temporada, prefiero hacer los tarritos de uno en uno o dos en dos si regalo alguno ya que mi mermelada tiene algún fan que otro. :-)

120 gr de manzana pelada (aporta cuerpo a la mermelada y no quita sabor al ser una fruta neutra)
140 gr de fresas
60 gr de pasas de corinto (aportan dulzor al ser receta sin endulzantes ni edulcorantes)
64 gr de agua
1 gr de kuzu (actúa como espesante) yo uso este de Terrasana que puedes comprar en la web Blai Blai

Como no, uso mi querida Thermomix, que haría yo sin ella!!
Coges la fruta y la trituras en la thermomix 8 segundos a velocidad 5, a continuación la cueces a 100 grados durante 18 minutos a velocidad 1, mientras disuelves en un vaso, el kuzu en los 64 gramos de agua y al finalizar la cocción de la fruta, remueves el kuzu o se queda en el fondo del vaso, y lo incorporas a la jarra de thermomix para cocer todo junto a velocidad 1 durante dos minutos más, y ya tienes lista tu mermelada. si haces más cantidad y quieres hacer conservas, no olvides esterilizar muy bien botes y tapas, aquí te dejo instrucciones.



Y ahora le toca el turno al pan, este pan, me recuerda a los panes alemanes por la consistencia ya que no es un pan seco ni ligero y las pasas le dan algo de dulzor, ¿podría llamarse bizcopan? ¿o pancocho? no se, solo se que tanto tostado como sin tostar está de vicio de bueno, así que vamos con la receta:

1 molde alargado
25 gr de pasas
25 gr de semillas de girasol (dejadas a remojo la noche anterior)
10 gr de semillas de calabaza (a remojo también)
20 gr de semillas de lino (remojadas again)  (ver porqué es bueno remojar semillas)
300 gr de agua
35 gr de aceite de oliva virgen extra
15 gr de panela
6 gr de levadura seca de panadería
200 gr de harina integral de centeno
200 gr de harina integral de arroz
1 cucharadita de sal

Primero puse pasas, pipas de girasol y de calabaza en la jarra de thermomix y las trituré 10 segundos a velocidad 5, (si quieres que se vean, no las tritures). Después añadí el agua, aceite y panela y puse a batir 3 minutos a temperatura 50º velocidad dos, (velocidad 1 si decides no triturar semillas).

A continuación incorporé la levadura y las harinas, por último la sal, mezclado todo a velocidad 3 durante un minuto, y después otros 3 minutos giro a la izquierda velocidad espiga junto con las semillas de lino y su agua.

Ahora es el momento de sacar esa masa con una cuchara y echarla al molde, como es pegajosa y no la típica masa de pan, hay que usar una cuchara y la jarra queda toda pegajosa.
Es un rollo lavar la jarra ahora, pero lo que me simplifica el trabajo lo merece :-) Conste que no soy presentadora ni vendedora de Thermomix, simplemente la adoro. :-)

Ahora la masa ya está en el molde, y por encima tiene algunas pipas que dejé sin moler para adornar:




Después del reposo (dentro del horno apagado, porque hace mucho frío), espolvoreé un pelín de harina por encima, y ahora llega el turno del horno, precalentar a 220 grados calor arriba y abajo sin aire creando atmósfera húmeda con recipiente con agua en el fondo (mi próximo horno con función vapor, Reyes Magos tomad nota ;-D)

Y a continuación hornear a 180 grados en la rejilla durante 55 minutos (aunque 60 minutos le habrían venido igual de bien).
Después de reposar unos 20 minutos en el horno cerrado ya terminado, lo saqué sin poder resistirme a probarlo, y ya catado lo volví a dejar en la rejilla del horno a que fuera enfriando muyyyy lentamente. Y aquí está el resultado. 


Se ven las semillas y las burbujas de aire, poco a poco aprenderé a hacer fotos a la comida, de momento me conformo con que sea comestible y en casa me den el visto bueno, que es la mejor recompensa además de lo bien que me lo paso en la cocina.


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